domingo, 18 de mayo de 2008

Primera semana, la transición

Nunca es recomendable hacer cambios de un día para otro, lo que he aprendido en esta semana es que todo es gradual y que después de años de hábitos destructivos es normal recaer. 

Aunque no es lo más deseable.

Pasar de creer que todo está perdido y levantarse a las 4 de la tarde, beber como idiota y despertar en la madrugada con una revelación. Cuando uno más se siente perdido, es cuando más necesitamos atendernos y volvernos al camino.

Tengo el estómago inflamado y solo hasta hoy he seguido la dieta, logré pasar 4 días sin coca-cola. Me falta expresarme y contar con alguien...

Pero... cómo puedo hacerlo si no tengo a nadie que me quiera de verdad escuchar?? Hablé conmigo, sólo yo me conozco tan bien y eso me ha aliviado.

Cuando más quiero dormir es cuando más me doy ánimos para levantarme, aunque a veces sea difícil.

Cuando más creo que es difícil realizarme, es cuando repaso mi historia y veo que de peores he salido.

Cuando menos quiero salir y empezar de nuevo, es cuando más de doy cuenta que no debo ser tan duro conmigo y tengo derecho a intentarlo otra vez, a enamorarme, a cuidarme y conocer gente nueva.

Cuando siento el nudo en la garganta es cuando sé que debo decir lo que siento.

Esta semana sólo hice 30 min de ejercicio, espero hacer esta semana las 5 horas correspondientes.

El hecho de poder lograrlo otra vez me emociona, porque cambia mi mundo, todo funciona y así pueda conocer al agente que quiero pero sobre todo, logre fincar una vida, consolidarla y olvidar todo el pasado.





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